Llega el otoño: los 10 consejos para librarte de las alergias más agresivas
Afecta especialmente a la población más joven.
Se acercan los meses de las lluvias otoñales y con ellos de nuevo las alergias, mucho más agresivas que en la primavera contra todo pronóstico, y en especial con la población más joven. Es esta una época en la que volvemos a cerrar las ventanas por la bajada de las temperaturas y, aunque conviene cerrarlas durante los momentos del día en que la polinización es más intensa, también es recomendable mantener la casa ventilada para evitar las humedades. Tanto si sufres de alergia al polen, a los ácaros del polvo o al pelo de las mascotas, te contamos las diez claves para pasar un otoño sin estornudos ni el molesto picor de ojos.
1. Decoración: Aunque amueblar la casa al estilo Luis XVI con grandes alfombras y tapizados coloridos es una opción muy elegante, quizá no es el mejor ambiente para un alérgico. En estos tejidos y soportes los ácaros encuentran un auténtico paraíso en el que reproducirse con más rapidez. Sin duda, un estilo minimalista con muebles de madera o metálicos, sin tapizados de tela, ni moquetas ni alfombras, y con cortinas lavables, sería preferible. Pero si te gustan los muebles con manteles, las sillas tapizadas y llenar la casa de cojines, límpialos con regularidad, bien sea lavándolos o utilizando el aspirador o mejor aún, un sistema de higiene y limpieza.
2. Cierra las ventanas: En los días en que la concentración de pólenes es más elevada, conviene mantener las ventanas cerradas por la noche para prevenir los síntomas de la alergia, según aconsejan desde la página web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Si es necesario, añaden, usa aire acondicionado, que limpia, enfría y seca el aire. La recomendación se extiende a subir las ventanas del coche mientras conducimos. También es recomendable cerrar las ventanas a media mañana y al atardecer, cuando hay más polen en el aire. Por el contrario, si una habitación ha estado cerrada mucho tiempo, es necesario abrir las ventanas y ventilarla durante las horas centrales del día.
3. Tu dormitorio, un templo de la limpieza: Es una de las estancias de la casa en la que pasamos más tiempo, así que debería tener los muebles imprescindibles para que el polvo no se acumule en ellos el polvo es alimento de los ácaros. Evita acumular ropa, libros, aparatos electrónicos, discos, etc. y, si tienes muñecos de peluche, lávalos con regularidad o añade a tu colección otros de plástico. En lugar de cortinas, los estores son más fáciles de limpiar por carecer de pliegues y tener una textura lisa.
4. El colchón: Si hacemos caso a las recomendaciones, al menos deberíamos dormir ocho horas al día. Por eso, mantener una buena higiene en el colchón y las sábanas es muy importante. En nuestra cama habitan entre 100.000 y 10 millones de ácaros del polvo, y aspiramos sus deshechos sin apenas percibirlo. Los especialistas sugieren que el colchón y la almohada sean de fibra sintética (poliuretano) y en el caso de la almohada, que nunca esté hecha o rellena de lana o plumas. Además, es conveniente usar fundas específicas antiácaros en colchón y almohada. Cada cierto tiempo también es bueno hacer una limpieza en profundidad del colchón para eliminar todo tipo de sustancias alérgicas que nos afectan en el día día. Para ello Kobold dispone accesorios como el MP440 Y MR440 para eliminar todas esas sustancias que producen alergias y nos evitan tener un descanso sano y placentero.
5. El aspirador, mejor con filtro: Numerosas instituciones y organismos médicos consideran clave consideran clave el uso de aspiradores con filtros purificadores del aire. El recogedor de partículas de alta eficiencia (HEPA en sus siglas en inglés) puede atrapar micro partículas como el polen, los ácaros del polvo, la caspa de los animales o el humo del tabaco. Según el servicio nacional de salud del Reino Unido (NHS), este tipo de filtros puede absorber más polvo que los aspiradores convencionales. Un ejemplo lo encontramos en el aspirador vertical VK200 de Kobold, con su set de limpieza de colchones y el cepillo eléctrico de textiles. Sus bolsas filtro captan partículas diminutas de polvo y alérgenos, como excremento de ácaros, polen y esporas de moho. “Estas bolsas filtro garantizan un aire higiénico”, explica Jens Töepel, director de innovación de Kobold. “Los olores, que también afectan a los alérgicos, quedan neutralizados directamente en el sistema de filtrado”.
6. Limpia los aparatos de aire y calefacción: La Escuela de Medicina de Harvard recomienda en su página web cambiar los filtros tanto en el aire acondicionado como en la calefacción central. “Limpia los respiraderos, los conductos de ventilación y las rejillas de calefacción también”, apuntan desde la universidad estadounidense. “Esto contribuirá a eliminar los alérgenos dentro de la casa”.
7. Ten cuidado al tender la ropa: Es preferible que no cuelgues sábanas ni ropa a secar al aire libre si sufres de alergias, porque el polen puede acumularse en ellas. Además, para evitar el efecto perjudicial de las esporas de moho, es aconsejable evitar el secado de ropa en el interior de la casa, no almacenar prendas de ropa en armarios con humedad y tampoco aprisionar la ropa en los armarios al guardarla sin dejar espacio para que se ventile.
8. Dúchate con frecuencia: se recomienda que las personas alérgicas se duchen frecuentemente ya que se eliminan los pólenes del pelo y de la piel. Lavar las fosas nasales con una solución salina es también de gran ayuda. Por otro lado, evita que el aire húmedo se disperse por la casa cuando estés en la ducha o en la cocina. Abre las ventanas pero mantén las puertas cerradas Usa los extractores de humos”.
9. Animales domésticos: En el caso de tener mascotas en la casa, el NHS británico sugiere una serie de consejos para minimizar las reacciones alérgicas. Primero, “lava a las mascotas al menos una vez cada quince días”; segundo, “lava a los perros fuera de la casa” y tercero, “lava con regularidad las sábanas y los tejidos con los que el animal haya estado en contacto”.
10. El césped, que lo corte otro. En los días en que el recuento de pólenes es más elevado, deberías alejarte de zonas con mucha hierba y procurar no exponerte al exterior entre 5 y 10 de la mañana. Si tienes césped en el jardín, puedes pedirle a alguien que lo corte por ti, ya que las hojas secas pueden albergar esporas de moho. Otro de los consejos es usar gafas de sol envolventes para proteger los ojos del polen. El Ministerio de Salud, Servicios Sociales e Igualdad da a conocer en su página web diferentes sitios en los que informarse de las concentraciones de pólenes, como la Red Española de Aerobiología y la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica.